Imagina que estamos en 1960 y el cliente te pide que hagas un spot para de mostrar la fiabilidad del Volkswagen Beetle en invierno. La verdad es que devió ser un reto apasionante para los creativos de DDB porque el coche era pequeño y la percepción de la gente sobre él no era precisamente el de seguridad. Después de intensas horas de trabajo se plantearon está sencilla pregunta ¿Cómo llega el conductor del quitanieves al quieta nieves? Y con ella crearon una de esas campañas que, incluso hoy en día, nos dejan con la boca abierta.
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